Este año la lluvia sigue estando presente en la semana grande, pero según las previsiones nos va a dar una tregua para sacar al más grande de Linares, a nuestro Nazareno.
Ya está todo a punto, la túnica, la capa, el clarinete, las partituras... pero lo primero, primerísimo que he preparado ha sido la ILUSIÓN.
Este sentimiento nazareno ha crecido durante estos 19 años que llevo viendo al Nazareno salir desde dentro de la procesión, y cada año lo siento con más fervor y más fuerza.
Me siento orgullosa de pertenecer a esta GRAN BANDA, la Banda del Nazareno. La que me ha visto crecer, y que me ha enseñado tantas cosas. Y orgullosa de contar con gente que sin ellos no sería lo mismo.
Esta noche volveremos a encontrarnos con Ël, podré darle gracias por muchas cosas, y volveré a pedirle otras tantas.
Esta Banda va a dejar impregnada cada nota por cada calle de Linares.
Esta Banda va a sonar grande porque ya lo dice nuestro nombre.
Esta Banda tocará con el instrumento, con el sentimiento y con el corazón.
Y dicho esto, solo espero ansiosa a que llegue el momento de escuchar la trompeta marcando Aida, bajarme el caperuz y por fin decir: ¡¡¡ya es Viernes Santo!!!
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