PATATAS BRAVAS

La receta de hoy es un clásico en los bares de nuestro país. Quien se haya comido una ración de bravas en algún bar de Madrid, estará de acuerdo conmigo en que le supo a gloria. Y el que haya tapeado con una cerveza fría y una tapa de bravas en la mesa, rodeado de buena gente, también estará de acuerdo conmigo en que son momentos inolvidables, esos momentos que hemos añorado y seguimos añorando en cierto modo todavía. 
La entrada de hoy va dirigida a animar a todos aquellos que dependen precisamente de esto, de que un bar se llene, para poder subsistir. La salud es lo primero, así que gracias por esperar; ansiamos poder llenar vuestros bares pronto pero con el convencimiento de que todo va bien ahí fuera. 

Mientras tanto os dejo mi receta de bravas, para que la podáis reproducir de la manera más rica en vuestra casa. 
Feliz domingo.

INGREDIENTES:
- Patatas para freír
- Salsa mayonesa (opcional)
Para la salsa brava:
- Tomate frito de brik
- Aceite de oliva
- Pimentón de la Vera dulce
- Una cayena
- 3 gotas de tabasco
- 1 cucharada de vinagre
- Sal

PREPARACIÓN:
- Pelar las patatas y cortarlas a dados y meterlas en agua media hora.
- Mientras, hacemos una mayonesa casera o simplemente la usamos ya hecha (como se prefiera) y la ponemos en un biberón (llamamos biberón a un recipiente de plástico con un pitorrillo fino para servir la salsa en forma de hilo).
- En una sartén, ponemos aceite de oliva, un chorrito, y lo ponemos a fuego medio, cuando esté medianamente caliente ponemos la cayena, la cucharada de vinagre, las gotas de tabasco y una cucharadita de pimentón de la Vera y removemos enseguida sin que se nos pegue, si no amargaría. Inmediatamente después echamos el tomate frito de Brik y un poco de sal y removemos dejando que hierva un par de minutos para que el tomate coja el sabor picante. Retiramos la cayena. Echamos en un biberón.
- Freímos las patatas bien escurridas, en abundante aceite de oliva, hasta que estén doraditas. Las servimos en una fuente y regamos con ayuda de los biberones con las dos salsas, o sólo con la brava (al gusto). Tomar así recién hechas. Están exquisitas.